Proyectos artísticos y multimedia


Desde el 13 de Marzo

Reales Atarazanas, Valencia

David Aliaga

David Ábalos Aliaga

Separa la penumbra

«Separa la penumbra de la frente y del río; empuja hasta la sala mi penumbra y dóblale su ala por donde se mora a contracorriente (y aun su lana se mora por las fuentes). Duérmete y vela: liba, en la cala, ojos negros, aquello que resbala como apéndice de sueño…». Estas líneas constituyen el comienzo del soneto que sitúo en el centro de este proyecto, como fuego interior. En el proyecto, lo primero es la lírica. La lírica actúa y es iniciática. Para ello, he abierto el espacio primero con la palabra, con lo más abstracto —por ejemplo: «la penumbra»—: «Separa la penumbra de la frente y del río», para, después, incorporar las esculturas. La escultura llega del fuego.

Pienso que reconocer el espacio sólo como un a posteriori del espacio lingüístico —y negarme a la posibilidad de un espacio estético— deposita junto al trabajo una amarga realidad de la que también hacerse cargo: la escultura siendo a la vez la hermenéutica y el canal de la hermenéutica que no pertenece a la hermenéutica. Escultura: canal, cáscara. No palabra… Si no es una palabra —historia—, la flexibilidad del tiempo termina con ella. Mi propuesta se centra en trabajar con este tiempo estanco que es el emblema de todo objeto y en todo lugar.

La llamada de atención sobre lo histórico —sin embargo: parte del trabajo está compuesto de útiles que son en la cultura, como una carretilla, lana de roca para el aislamiento de viviendas o un atril— funciona como interlocutor y soporta el juego para una cercanía. Junto al poema se sitúan los útiles; junto a los útiles, el poema. Y, más tarde, ya después, la escultura —el soneto concluye: «Y una canastilla,…».

Carmen Armenteros

Carmen Armenteros

Play On

Play On surge de la recuperación de la memoria alrededor del juego. Está ideada como un espacio de ensoñación del que uno entra y sale igual que se entra y sale de un patio de recreo. El mundo paralelo o imaginario que surge al aceptar entrar en el juego, se materializa, toma la forma conceptual de su propio espacio activador. Si hay una regla implícita en el juego no reglado, en el juego libre, sin normas pautadas, es que se entra y sale voluntariamente. Al igual que no se le puede obligar a ningún niño a subirse a un tren imaginario, no se puede obligar a nadie a “seguir el juego”. Este espacio es una invitación abierta a la ensoñación. Esta obra es un re-creo de un recuerdo que había sido enterrado bajo estratos de tiempo. Un recuerdo de hastíos de verano, de repetitivos descansos en el patio, de tardes de parque. Es la reminiscencia de ese bendito aburrimiento, motor de la imaginación y a la larga, motor de realidad. Son habitaciones hechas con dos cartones, escaleras transformadas en castillos y trayectos de apenas unos pasos convertidos en largos viajes en avión. La incandescencia del neón le concede un aire fantástico y nebuloso, casi insomne. La intangibilidad de la luz y su fragilidad lo hace un “parque intocable”, imaginado pero corpóreo, tanto como metáfora de la memoria, como ciertos anhelos relacionados con el juego y la libertad. Anhelos que actualmente cobran, con la pandemia, un nuevo sentido y que podríamos concentrar también en la imagen de los parques infantiles cercados por cinta policial. Prohibido jugar.


Atentos, de esta obra se entra y se sale a placer.

Lucía Blas

Lucía Blas

49/5

49 bolígrafos usados. 49 contenedores de tinta gastados durante 5 años. 5 cursos. 300 créditos. 3000 horas. Apuntes, pruebas, deberes, superaciones, fracasos, satisfacciones y frustraciones. Tiempo de oír qué es política y cómo funciona. 5 años de aprendizaje, fuera y dentro del aula. De conocer y crecer. 5 años que nada y todo tienen que ver con ahora. Tras ellos queda un rastro de 49 bolígrafos. Residuo de lo que fue, acumulado durante todo ese tiempo, convertido en elemento narrativo y unidad de medida de éste. Objeto atesorado a modo de monumento al momento, como forma y vía de recordar el pasado que nos define en el presente. 49/5 se presenta como un estudio entorno al conjunto de dichos objetos coleccionados a lo largo del tiempo, surgido de un impulso por averiguar todo sobre estos. Una necesidad de analizar y reinterpretar el inventario de una época. Son nuestros objetos los elementos mediante los cuales manifestamos nuestra presencia, con los que podemos realizar un retrato fidedigno de quiénes somos. Son ellos los que sustituyen nuestra ausencia y constituyen la presencia de nuestra vida. A través de las distintas piezas que componen la instalación, se materializa la idea de indagar en el conjunto casi de forma obsesiva. Cuánto espacio ocupa, cuánto pintan, cuánto pesan, cuánta tinta, cuántas hojas, cuántas horas. Se trata de una experimentación de sus distintas interpretaciones, posibilidades y aplicaciones como recurso pictórico y escultórico. Valerse de una herramienta simbólica en el pasado, rescatarla, para generar una narración de esta en el presente. Dar utilidad a lo inútil, a aquello que perdió su función hace mucho tiempo. Reconvertirlo en sujeto y motivo de interés y estudio. Valorización de lo insignificante, lo irrisorio, lo anti espectacular. Ceremonial de lo ínfimo. Material de lo vivido. Visualización del tiempo

Sara Gurrea

Sara Gurrea

Naturales de 2º de la ESO

Con la evolución de los teléfonos inteligentes nace la llamada «nueva pornografía», mucho más accesible, gratuita y aparentemente ilimitada, capaz de alcanzar un público más amplio de lo que nunca pudo hacerlo en los soportes tradicionales. Entre ese público, se encuentran los adolescentes en plena etapa de consolidación de su identidad sexual.

Según las últimas encuestas cada vez son más los jóvenes y de menor edad los que acceden por primera vez a portales pornográficos. En ocasiones su primer encuentro con la pornografía se produce de forma completamente casual, sin ninguna clase de búsqueda voluntaria, a través de las ventanas emergentes de anuncios que aparecen en algunas webs.

Acceden a portales, en su mayoría gratuitos, en los que se muestran situaciones de alto riesgo, violencia y en los que se generalizan los estereotipos de género más deplorables. Las relaciones en los canales más accesibles de pornografía son una representación de los modelos de género dominantes y los adolescentes hacen de esos vídeos, su canal de aprendizaje sobre las relaciones afectivo-sexuales.

«Naturales de 2º de la ESO» se trata de un proyecto participativo en el que, a través de la difusión en redes sociales e internet, personas de todas las edades seleccionan un título real de alguno de los portales gratuitos de pornografía.

El título, que cada una de las personas escribe a mano, se envía a través de internet y es escrita de nuevo mediante plotter en bolígrafo sobre hojas de libretas escolares, manteniendo la caligrafía original del autor.

Los títulos, que incluyen en ellos una cantidad suficiente de lenguaje violento, racista, machista y nocivo permiten generar una reflexión a través de la práctica artística sobre los lenguajes utilizados habitualmente, de acceso libre y sin filtros, en los portales de difusión de videos pornográficos.

Micaela Maisa

Micaela Maisa Montero

Remedios para el mal de ojo

El mal de ojo es una creencia ampliamente extendida y aún muy viva. Relacionado generalmente con la envidia, lanzado intencionada o desintencionadamente, buscamos entenderlo como una manifestación del poder que le atribuimos a la mirada, y de los efectos que consideramos puede tener en nosotros.

Por otra parte, y en relación a la mirada, Sartre concebía la mirada como un mecanismo que tiene un poder objetizante, que podríamos pensar como dañino, aunque ineludible, y que, al igual que el mal de ojo, podría ser considerado escopofóbico. Así, entendemos que el mal de ojo, una cuestión que podría parecer simplemente una superstición, puede conectarse con una manera general de entender la mirada intersubjetiva.

Encontramos esta tensión ya en la mitología griega, por ejemplo, y de manera repetida: el mito de Medusa, de Argos, de las Grayas y otros demuestran una atención particular a los mecanismos de la mirada y al ojo como símbolo.

Se han utilizado a lo largo de la historia diversos amuletos para protegerse de los efectos del mal de ojo, tales como nazares, espejos, lúnulas, cornicelli, piedras semipreciosas, aceites, etc. Remedios para el mal de ojo juega con algunos de estos amuletos y elementos utilizados para repelerlo y curarlo. El ojo, el cristal, la luz, la cascada, la cortina, las lágrimas, el agua, se unen y concatenan para crear una suerte de amuletos, que insisten una y otra vez en una imaginería del ojo y la mirada, que oscila entre suscitarla y protegerse de ella.

Victor Visa

Víctor Visa

Frivolizar con los símbolos

Un símbolo es, según la R.A.E un “elemento u objeto material que, por convención o asociación, se considera representativo de una identidad, de una idea, de una cierta condición, etc”. Entendemos pues, que el poder del símbolo no es universal, depende del contexto en el que se encuentra y su poder es mudable, esta última característica, la capacidad de transformación de dicho poder es lo que más nos interesa para comprender la obra Frivolizar con los símbolos.

La obra está compuesta por un total de 99 piezas, dibujos y pinturas sobre papel, todos del mismo tamaño, 100 x 70 cm, y ordenados en cuadrícula. Es importante esta disposición, pues el efecto de acumulación y multitud anula el poder de cada símbolo convirtiendo a cada uno de estos en parte de un todo.  Las piezas están realizadas en diversas técnicas, acrílico, ceras y spray,  tratadas con un gesto directo e intuitivo que convierten el mismo proceso de creación en un acto de frivolización hacia cada imagen que se trabaja pues el acto de pintar se transforma en un juego en el que se alteran colores y formas pervirtiendo cada uno de estos símbolos.

En cada una de las pinturas y dibujos se puede leer una descripción breve o el nombre del símbolo, en ocasiones este texto corresponde al título de la imagen extraído de “google Imágenes”,como en la obra Santa Bárbara imageshack ,otras veces este texto puede ser un pie de foto extraído de un libro, como en “Nigredo, transmutación de la materia” o nombres extraídos del imaginario colectivo, Oz y martillo no es importante la rigurosidad de la información que aparece en cada obra. Frivolizar con los símbolos trata también, de manera tangencial, el tema de la apropiación cultural, p. ej. en la pintura Patron textil de Jujuy donde se puede ver una interpretación de un motivo decorativo extraído de un patrón textil tradicional de la provincia de Jujuy, Argentina.

Frivolizar con los símbolos pretende poner en duda el poder de los símbolos e invitar a la reflexión sobre la utilización de imágenes y objetos de especial trascendencia.

Ana Monzó

Ana Monzó Minguet

Mirar sin prisa

Este proyecto surge de mirar aquellas pequeñas cosas que ocurren a nuestro alrededor, cosas que a priori nos parecen insustanciales pero que por el contrario son capaces de captar nuestra atención y permanecer en nuestra memoria. Con esto me refiero a una luz, un reflejo, el color de una sombra, un sonido, o el recoveco de una esquina. Aunque podemos verlos en muchos lugares, he trabajado con los que me encuentro en un espacio específico: una casa rural situada en la huerta valenciana con unas características espaciales y materiales concretas. Este proyecto, por tanto, consiste en visibilizar, materializar, todos estos sucesos a través de un conjunto de piezas abordadas desde una visión pictórica.

La arquitectura rural valenciana se ha convertido en un referente importante para esta muestra. Por ello, en este conjunto de piezas se han incluido algunos de sus colores, formas y materiales para poder rememorar el recuerdo de dichos espacios. En consecuencia, podemos encontrar, corrales, pasillos estrechos, piezas encaladas y objetos realizados con brea de pino y alquitrán. Estos últimos buscan recuperar la imagen de las fachadas negras que suelen verse en este tipo de construcciones, como también, los recorridos de las acequias que suelen rodearlas.

Una parte importante del proceso de trabajo se centra en buscar cual es el material que mejor refleja aquellos recuerdos. Pero también, se trata de entender cuál es la forma más coherente de incorporarlos. Por este motivo, son los plásticos amarillos los que recrean la luz de un pasillo o un bloque de jabón de brea el que imita el fondo de una acequi

Estos fragmentos espaciales y arquitectónicos demandan tiempo para ser vistos y para disfrutar de sus materiales. Algunos requieren que nos acerquemos para ver qué hay detrás de sus muros, otros, han de ser escuchados y otros, olidos.

Suri Kim

Suri Kim

3 A.M.

2020. Todo ha cambiado, vivimos una pandemia. El 12 de enero de 2020, China hace pública la existencia del virus Covid-19. Desde entonces, hemos pasado por mucho. Es un tiempo demasiado difícil. Un momento para reflexionar sobre la inestabilidad y la vulnerabilidad de nuestra sociedad. De darnos cuenta de que somos minúsculos. Un momento para admitir nuestros fallos y reconocer la ignorancia existente. Ya llevamos un año y todavía no sabemos hasta cuánto tiempo vamos a estar así. Al principio, pensábamos que iba a durar unos meses, pero la situación fluctúa todo el rato. Parece reflejar nuestro comportamiento ante la pandemia.

En Corea, existe la tradición de ir a ver a un chamán ( Shingyo o Mugyo en coreano ) en tiempos de crisis. Se cree que estos mundang, practican la religión de los espíritus; pudiendo comunicarse con los dioses de la naturaleza y los antepasados, para contestar preguntas y adivinar el futuro en un estado de éxtasis. A través de la meditación y rituales diarios, que realizan en las montañas en la madrugada, los chamanes consiguen purificar su alma. Actuando como intermediarios entre los humanos y los muertos. Además, practican rituales como el gut u otros ritos similares para pedir el bienestar de la comunidad, para purificar la energía, incluso para despedir a alguien muerto. En realidad, esta creencia se remonta a la prehistoria. Desde entonces ha acompañado al pueblo coreano, sirviendo de gran aporte para la cultura, aunque hoy en día, sus costumbres se están perdiendo cada vez más.

En consecuencia, 3 A.M. (2020-21) es una instalación inspirada en estos rituales. Una interpretación de un espacio meditativo y de ritual (para un espacio expositivo). Según Byung Chul Han, los ritos transforman el “estar en el mundo” a “estar en casa”, convirtiendo al espacio en un lugar seguro a través de lo que se reconoce. Lo simbólico genera comunidad, haciendo que uno se sienta en un hogar. El hecho de planear una exposición se transforma en un ritual, generando un sentido de lo común a través de ciertos elementos reconocibles.

Santiago Fernández

Santiago Fernández Honrubia

Escenografías del poder

Escena primera, toma uno.

Camino por un suelo de mármol blanco, oigo mis pasos y el eco de cada chasquido del tacón de mi zapato golpeando las brillantes y enceradas baldosas. Me dirijo hacia el final del pasillo donde hay una inmensa puerta de caoba y pomos dorados, empujo con fuerza para abrir y en su interior encuentro una pista de baile. La base de música techno no me deja escuchar lo que alguien dice desde la tribuna, no veo bien quien está allí arriba, parece una estrella del pop, pero va vestido con traje y corbata. Toco la pantalla de mi Smartphone y paro la reproducción del video, el usuario de YouTube que ha publicado estas imágenes lo ha titulado Live: Rapper Kanye West holds first presidential campaign rally in South Carolina. Hago scroll para ver la lista de videos recomendados y hay uno que me suscita más la atención. Aprieto encima de la pantalla con la yema de mi dedo índice y aparece Pablo Iglesias dando un mitin en la plaza del Sol, unos instantes más tarde empieza a sonar la conocida base de hip hop de la canción Still D.R.E. de Dr. Dre ft. Snoop Dogg mientras grita al público “¡Qué bonito es ver a la gente haciendo historia!”. Bloqueo mi Samsung galaxi A30 y la pantalla se queda en negro. Trato de seguir atravesando la pista de baile, me arrodillo para poder caminar entre la multitud y finalmente llego hasta una sala de prensa. Algunos periodistas se giran al verme enderezarme, pero rápidamente se dan la vuelta, un azafato trae en una mesa con ruedas un gran televisor de plasma donde aparece el busto del presidente. Un periodista hace una pregunta al televisor y este le contesta, como si de un oráculo se tratase, un conjunto de pixeles dando respuesta a preguntas arrojadas por la voz humana. Cierro los ojos y vuelvo a escuchar la base de techno, un ritmo acompasado y simétrico, que hace mover mi cuerpo al unísono y acompaña de nuevo a mis pasos hacia el brillante mármol - ¡Corten! - Final de la primera escena.

Cambio de decorado: Escalinata de piedra del palacio real.

Noelia Medina

Noelia Medina Fernández

Hablar al aire

Hablar al aire es el modo en el que un grupo de jóvenes han hecho su vida en un lugar aislado: desde la libertad, y con cierta despreocupación por el tiempo. De igual forma, Speaking into the Air da título a un libro escrito por John Durham Peters en el que a través de una visión global de la historia de la comunicación, se incide en lo complicado de distinguir la comunicación a distancia (chats, mensajes, correos electrónicos, etc...) de la comunicación con los que ya no se encuentran entre nosotros. 

Más allá de plantear las similitudes o diferencias que el término Hablar al aire pudiera significar o sugerir, en este proyecto se propone la posibilidad de la existencia de una interfaz ficticia que permite interactuar con los que ya no están. Mediante la construcción de una narración central que entrecruza ficción y realidad, las formas lúdicas de contacto de este grupo de jóvenes con lo que se ha denominado “el más allá”, encuentra ciertos paralelismos con la posibilidad de interactuar con un amigo ausente. 

Adicionalmente a la narración central, un ecosistema de imágenes, objetos y texturas se encuentran trenzando ideas alrededor de conceptos como la memoria blanda, la percepción sensorial, la idea del cloud, el archivo físico o las memorias hard, en las que lo fantasmagórico y la ausencia toman relevancia como fondo de toda la propuesta.